
Malditos (o benditos) peones doblados
Existe un injusto rechazo a los peones doblados por parte de los principiantes de ajedrez, que encuentran explicaciones sobre ese tema en capítulos sobre "peones débiles" o "debilidades en la estructura de peones". Los peones doblados pueden ser débiles, pero también pueden ofrecer algunas compensaciones, como vamos a ver en este artículo.
Siempre que trato este tema recuerdo una anécdota. En cierto Campeonato de España por edades en el que me encontraba como entrenador de los jugadores de Andalucía, me encargaron la preparación de una simpática y pizpireta jugadora sub10. Cuando observaba en directo una de sus partidas pude ver cómo su rival cambiaba un alfil por su caballo de f6. "Quedará con el enroque débil con los peones doblados en f", pensé. Pero, para mi perplejidad, la chica, tras pensar unos segundos, no retomó en f6 y quedó con pieza de menos. Con una sana estructura en su enroque, pero... ¡con pieza de menos!
Cuando analicé con ella la partida le pregunté. "¿por qué no has retomado en f6?" Me miró extrañada y respondió: "¿Y quedar con peones doblados en el enroque?".
En este artículo te voy a hablar de algunas estructuras características con peones doblados, sus ventajas e inconvenientes, pero voy a insistir muy especialmente en los beneficios que pueden tener estos peones.
Los típicos peones doblados "nimzoindios"
Una de las aperturas que con más frecuencia deriva en una estructura con peones doblados es la Defensa Nimzoindia, donde las negras, más pronto o más tarde, acaban cambiando su alfil de b4 por el caballo de c3.
Veamos un par de ejemplos: en el primero las negras castigan de manera temática los peones doblados del blancos. En el segundo, las blancas aprovechan su ventaja de espacio. Muchas veces el peón doblado de c3 sirve para reforzar nuestro centro y hacer más segura nuestra ventaja de espacio.
Peones centrales doblados: ¿ventaja o debilidad?
Los peones doblados en las columnas e o d no son tan típicos como los que aparecen en las columnas f o c. Si se hallan aislados, por supuesto serán una debilidad. Pero en caso contrario pueden ser útiles para controlar importantes casillas y para abrir ciertas líneas.
En la Apertura Italiana existen dos casos muy concretos en donde uno de los jugadores queda con peones doblados en la columna e:
- Se produce un cambio de alfiles en e3.
- Se produce un cambio de alfiles en e6.
Con estos cambios se abre la columna f para el bando que dobla peones, por lo que en muchas ocasiones puede conseguir cierta actividad a a través de ella. También la dama encuentra un camino hacia el enroque enemigo (vía e8-g6 las negras, o e1-g3 las blancas).
En el siguiente ejemplo vamos a ver cómo las negras encuentran la típica actividad con esta estructura.
Y los peones doblados en la columna d, aunque menos frecuentes, también merecen nuestra atención. Mira el siguiente ejemplo de Carlsen, perteneciente a una Blitz, pero estratégicamente de mucho interés.
El asombroso centro... ¿perfecto?
Y ya que estamos hablando de los peones doblados en las columnas centrales te voy a mostrar un insólito caso de peones centrales doblados que ocupan e4, d4, e5 y d5. ¡Peones del mismo bando! ¿No me crees? Y no vayas a pensar que te voy a mostrar una partida de aficionados. Ni mucho menos. Dos fuertes grandes maestros. Aquí te dejo con la anécdota del día
Pero no quiero que te quedes con las ganas de ver cómo jugar con este centro, a pesar de las pocas probabilidades que existen de que se te presente en una partida real. En el siguiente ejemplo las blancas sacrifican una pieza para obtener este centro.

Peones doblados y aislados... ¡huye de ellos!
Debes huir de ellos, generalmente. De hecho un plan que debemos conocer para jugar contra los peones doblados consiste en tratar de dejarlos aislados. Nimzovitch decía que "hay que jugar contra el peón que hay junto a los peones doblados".
Te comento esta importantísima idea a través de un par de posiciones.
En la Defensa Nimzoindia, con la que comenzábamos este artículo, las negras suelen presionar en d4 (el peón que hay junto a los peones doblados) mediante e5 o c5. Si el peón de d4 desaparece los peones doblados se convertirán en aislados y, en ese caso sí que serán un claro objetivo del enemigo. Si el peón de d4 avanza, los peones doblados quedarán retrasados y las negras se apoderarán de la magnífica casilla c5 (normalmente usada por un caballo).
En la Apertura Española existen muchas variantes donde el negro puede quedar con peones doblados en c7 y c6, con un peón compañero en d6. Jugar contra ese peón de d6 sería la idea básica con la que llevar a cabo la estrategia que te estoy comentando en este punto.
Conclusiones
Te resumo a continuación algunas ideas que debes tener presentes con respecto a los peones doblados.
- Los peones doblados no son buenos o malos, todo depende de la posición.
- Al doblar peones abrimos alguna columna que quizás pueda proporcionarnos actividad.
- Al doblar peones, en ocasiones, acercamos un peón al centro, que puede controlar importantes casillas.
- Una estrategia importante consiste en jugar contra el peón que hay junto a los peones doblados.
Espero que este artículo te haya aclarado algunas ideas importantes y que puedas incorporar a tu juego nuevas estrategias relacionadas con este tema. Si te ha gustado... ¡comparte en redes, por favor! Y no olvides dejar un comentario con tus dudas y sugerencias