El gran enfrentamiento de los reyes

Hay posiciones de ajedrez que es necesario conocer, como las tablas de multiplicar. Se puede jugar mal la apertura, pero ganar confundiendo al oponente en el medio juego. Se puede calcular mal una combinación, pero hacer que la ventaja del oponente se anule con una defensa decidida y meticulosa. Se puede, al final, esperar salvarse de una mala posición tendiendo trampas en las que un oponente descuidado pueda caer. En general, en muchas posiciones desagradables todavía hay posibilidades de corregir las cosas después de futuros errores.

Pero hay errores que simplemente no se pueden corregir. Si se llega a una situación llamada “exacta”, es decir, en la que el resultado puede determinarse con exactitud y no depende de más luchas, sino de un simple inventario de rasgos característicos, si se cae en esa situación y se pierde, entonces todo habrá terminado.

Los tipos más simples de posición exacta son los finales de peones elementales.

La posición 33 es un “zugzwang mutuo”. Ambos bandos quieren que el otro juegue primero:

Posición 1-a

Juegan blancas

Posición 1-b

Juegan negras

En el diagrama 1 es evidente que si el último movimiento de las blancas fue Rd6, entonces “se apoderó de la oposición” y ahora gana. Mientras que si las negras acaban de jugar 1... Rd8, entonces se apoderó de la oposición y logran las tablas.

Existen varios tipos de oposición:

Posición 2-a

Oposición directa vertical

Posición 2-b

Oposición directa horizontal

Posición 2-c

Oposición diagonal

Posición 2-d

Oposición distante

En realidad en este caso quien mueva recibirá la oposición directa (sólo una casilla en el medio); en este momento los reyes están "fuera de oposición".

Esta es la regla de oro de la oposición:

Si los reyes están uno frente al otro con un número impar de casillas entre ellos, entonces el jugador que movió último tiene la oposición (es decir, es una desventaja tener que mover). Si, por otro lado, hay un número par de casillas entre los reyes, entonces quien tiene el turno para mover tiene la oposición.

Posición 3-a

En la posición 4-a, las blancas también ganarían si movieran sus piezas, ya que su rey está en una casilla tan buena:

Posición 4-a

Sin embargo, en la posición 4-b 35a podemos ver que la victoria blanca depende de que el rey blanco alcance la sexta fila. Aquí las blancas todavía ganan si son las negras las que mueven:

Posición 4-b

Pero sí son las blancas las que mueven solo pueden empatar:

Posición 4-c

Volviendo por un momento a la posición 3, podemos ver que el movimiento de las negras lograría empatar ya que el rey blanco no tiene tiempo de alcanzar una buena posición.

Posición 3-b

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